Edificio de viviendas. Carreteria 16

Edificio entre medianerías con bajo y tres plantas distribuidas en tres ejes. Bajo destinado al comercio pero conservando el zócalo y portada adintelada guarnecida en el tercio superior con resaltes en la clave y ángulos donde aparecen elementos florales.

Los balcones aislados de los pisos primero y segundo, con rejería de elementos curvilíneos, están guarnecidos por el tercio superior; cuentan con elementos verticales de fuerte resalte geométrico y con decoración floral. En el tercer piso los balcones presentan en la clave una máscara y una serie de elementos florales junto con bandas resaltadas semejantes a las de las plantas inferiores pero más macizas y poco airosas ya que dan sensación de pesadez al conjunto.

Por su singular ornamentación, permite catalogar a esta obra dentro de la corriente de modernismo periférico que fructificó en la ciudad. Las monteras integradas por molduras verticales enlazadas y decoradas con florones en las intersecciones constituyen una de las señas identificativas del arquitecto Manuel Rivera Vera, probablemente, el que con mayor frecuencia utilizó en Málaga el modernismo vienés, aunque sus rejas ofrezcan un bello diseño de carácter curvilíneo.

Edificio de viviendas. Luis de Velázquez 7

Paralela a calle Granada, y producto de la desamortización del antiguo Convento del Ángel, la calle Luis de Velázquez presenta numerosos ejemplos de buena arquitectura doméstica burguesa malagueña. En concreto, el edificio analizado se encuentra entre medianeras y presenta con bajo, tres pisos y ático, distribuidos en cinco ejes regulares.

La portada, centrada, presenta jambas rehundidas con círculo central y dintel ligeramente curvado en cartela destacada flanqueada por soleos. Se remata el conjunto con moldura recto que enlaza con el balcón del principal. Los pisos superiores, con paramento estriado, se diferencian por impostas. Destaca el principal con triple balcón corrido en el centro apoyado en ménsulas. La rejería utilizada al igual que en el resto del edificio es de barrotes de fundición con banda inferior geometrizada y de palmetas en la superior.

Los balcones adintelados están moldurados y presentan jambas rehundidas en las que se apoya mediante ménsulas el dintel que cubre en el piso o principal la decoración de máscara femenina con elementos florales simétricos de gran tamaño que va disminuyendo su relieve en los pisos superiores; el elemento decorativo central del dintel en el segundo piso es un jarrón y en el tercero una venera. Una cornisa, con decoración de ovas, apoyada en mensulillas pareadas, que coinciden con la esquina de los ejes marca el final de las tres plantas del edificio. Este se remata con azotea y ático retranqueado que presenta dos cuerpos avanzados en los ángulos que siguen la línea de fachada; se flanquean con un despiece que imita sillares y se abre en cada uno de estos cuerpos un balcón recorrido por impostas en el primer tercio.

Para terminar, sólo reseñar que este inmueble ha sido recientemente rehabilitado (Finales 2009) bajo la dirección de Óscar Agudo Ruiz.

Edificio de viviendas. Olozaga 8

Medianero con la edificación del anterior artículo, este edificio en esquina con la calle Sebastián Souvirón posee una estructura de bajo y cuatro plantas de balcones. Los vanos, todos adintelados, se disponen en cuatro huecos en la calle de Olózaga, dos en Sebastián Souvirón y uno en el chaflán curvo que une ambas fachadas, con vuelo, pero sin llegar a constituir cubilla.

El bajo conserva su disposición original, con zócalo de piedra y una decoración de remaches incisos, imitando sobre los dinteles un despiece falso. En un extremo se abre la portada, adintelada también y con sencillo guarnecido, y un motivo de tambores horizontales sobre el dintel.

En las plantas superiores, los balcones, de escaso vuelo, son muy sencillos, con rejería de forja. Disponen sobre el dintel panel de cerámica en las plantas interiores y falso despiece de dovelas en la inmediata superior. La última planta a ofrecer la misma decoración de remaches incisos del bajo. El chaflán se resuelve mediente un cierro de obra con ventanas y rejas de hierro, sin decorar y apoyado sobre pares. Remata a la altura de la última planta con balaustrada.

Al igual que su medianero su autoría es desconocida y su fecha de construcción es del primer cuarto del siglo XX.

Edificios de viviendas. Olozaga 10

Detrás del Mercado de Atarazanas se encuentra este edificio de bajo con zócalo de piedra y tres plantas de balcones sobre ménsulas separadas por impostas. Tiene seis huecos de fachada de los que se destacan los laterales mediante cierros de obra sobre peanas pseudoelípticas de forma bulbosa, cuyos huecos se separan por pilastras que diferencian las distintas plantas, sobre todo en la zona de las impostas.

Las cristaleras presentan vanos de medio punto, carpanell y adintelado, según las plantas, cubriéndose con vidrios de colores. Los vanos de los balcones son adintelados y se guarnecen en la parte superior con molduraje mixtilíneo sobre ménsulas formando un palmetón y ostentando candelieri. En la segunda planta el guarnecido forma una suave curva que entronca con el modernismo vienés, al igual que en los cierros de esta planta. Tiene rejería de fundición muy sencilla en su diseño.

La portada es adintelada, con embocadura de piedra y motivos agrutescados en el dintel.

Centro Andaluz de las Letras. Álamos 24

El Centro Andaluz de las Letras tendrá su futura sede en esta edificación (primavera 2010) que pese a las modestas dimensiones de su solar, se alza con pretensiones de palacete urbano, que le imprime singularidad tanto por su emplazamiento como por el lenguaje empleado.

Destacan la complejidad de sus volúmenes, la presencia de arcos de medio punto prolongados en el bajo, las esquinas achaflanadas, los óculos de la planta superior y, sobre todo, la importancia del balcón corrido entre las dos calles con decoración figurativa que potencia la esquina.

El diseño de la decoración de las fachadas está atribuido a Fernando Guerrero Strachan en 1905. El proyecto de rehabilitación dirigido por María Victoria Carreño se ha centrado en dotar de un "carácter institucional" a la vivienda manteniendo la ubicación del patio y la escalera, en cambio, en el exterior se ha extendido el zócalo por toda la primera planta.

Edificio de viviendas, Plaza del Marqués de Vado del Maestre 2

En la plaza de Vado del Maestre, conocida popularmente como plaza Mitjana, destaca este inmueble por la armónica distibución de huecos y la situación central de la portada respecto a las dos entradas de carruajes en los extremos, que sugieren su pertenencia a la burguesía comercial de la ciudad.

El tratamiento decorativo de los balcones, coronados por frontones curvos y triangulares, muestra la estratificación por usos. La calidad de sus rejas de fundición subraya su carácter señorial y palaciego, que realza su monumentalidad por la situación respecto a la plaza a la que sirve de fondo de perspectiva.

Este inmueble es ejemplo del buen hacer de los maestros de obras en el siglo XIX como fue su autor Rafael Moreno.

Palacio de los Marqueses de Crópani, Álamos 7

Construido en el tejido urbano del arrabal histórico sobre una parcela de dimensiones regulares y en esquina con un antiguo adarve, este edificio palaciego se implanta con cierto carácter de edificación exenta rematándose en una cornisa elevada sobre un entablamiento con glifos y metopas.

Su fachada principal clásica contiene numerosas referencias históricas a edificios de prestigio de la ciudad, como la Aduana en el tratamiento del bajo con sillares de piedra que, precisamente por sus reducidas dimensiones, pierde su solidez de basamento por una excesiva proporción de huecos sobre macizo.

Para finalizar, reseñar la encomiable labor realizada recientemente a este palacete.