lunes, 20 de junio de 2011

Edificio Tous. Puerta del Mar 10- 12






En una infinidad de ocasiones nos debemos enfrentar a la burocracia y a sus normativas (muchas de ellas son un auténtico galimatías por la enojante manía de nuestros próceres de utilizar un lenguaje complicado y casi sin sentido, embrollado, oscuro y confuso). Si este cúmulo se antoja ya suficiente para obstaculizar cualquier empresa, ha de añadírseles el profundo inmovilismo tanto en las normativas como posteriores interpretaciones a ciertas propuestas que en ciertos momento raya el surrealismo.

Los arquitectos no podrían ser menos.

En el caso que hoy nos ocupa  para  para poder construir el edificio se tuvo que presentar varios expedientes administrativos de justificación urbanística. La voluntad profesional, interpretando rigurosamente el Plan General de Málaga, encontró agujeros y contradicciones en unos textos de contenido simplificador y generalista.

NORMATIVA

"En las fachadas predominarán las superficies de macizo sobre las de hueco."

"Los huecos tendrán predominantemente proporciones verticales debiéndose adaptar a edificaciones colindantes."

Con estas premisas el arquitecto Manuel Ocaña del Valle (c. 2000) justifica su proyecto alegando lo siguiente:


En el proyecto de fachada predomina lo macizo sobre lo hueco, todo es macizo, ya que no tiene huecos, es un paño continuo enrasado.

La Normativa no prohíbe lo transparente frente a lo opaco. Lo transparente puede ser macizo.

No existen huecos, sólo una fachada maciza practicable. Al abrirse para la ventilación el aire penetra a través de una rejilla de lamas verticales, esa rejilla está modulada según cornisas de las edificaciones colindantes.



El edificio de cinco plantas está situado en un solar de 60 m2 en la céntrica calle de Puerta del Mar.

Se encuentra una participación actor-espectador en un cerramiento doble, de composición centrífuga, que proporciona paisajes enmarcados al usuario del edificio a la vez que entrega paisajes reflejados al transeunte.

El resultado es una fachada que cualifica el entorno urbano mediante camuflaje por reflexion, y que se manifiesta en un plano cambiante que absorbe y refleja las diferentes tonalidades de luz y color de las palmeras y los edificios de la calle.



El cerramiento se construye con perfilería metálica standard, con los reflejos del entorno, con vidrios policía y con vidrios compuestos que consiguen ser traslúcidos mediante la incorporación de un velo de fibra entre sus capas.